VENCE TUS MIEDOS.

El miedo puede ser real o imaginario, pero en cualquier caso su finalidad es protegernos y sabiéndolo emplear, es, también, una herramienta que podemos utilizar para crecer, prepararnos y conseguir resultados.

Tener miedo es algo natural, ya que es una de las emociones básicas que tenemos y constituye un mecanismo básico de supervivencia y defensa ante situaciones en las que estamos en peligro real y requerimos responder con eficacia y rapidez. Este tipo de miedo es beneficioso para el ser humano como especie, nos ha ayudado a sobrevivir.

Sin embargo, existe otro tipo de miedo que no es real, que nuestra vida o nuestra integridad no está siendo amenazada, lo experimentamos con la misma intensidad como si estuviera sucediendo y solo vive en nuestra mente.

En nuestro cuerpo lo vamos viviendo con las mismas respuestas fisiológicas de un suceso verídico, experimentando un incremento en la producción de adrenalina, incremento de la frecuencia cardiaca, se bombea más sangre a los músculos, se dilatan los bronquios y se intensifica la respiración, se produce mayor cantidad de cortisol y la amígdala está activada tomando decisiones antes supuesto peligro o situaciones que no están ocurriendo, incluso para cosas que pueden ser tan irreales como el miedo a no ser buen padre cuando, ni siquiera se tienen hijos o pensar que quizá ahora que compre el hipopótamo, no tenga manera de alimentarlo.

Cuando estoy dando sesiones de coaching, uno de los miedos que mis clientes me expresan frecuentemente es el miedo a no ser capaz de lograr sus objetivos y vislumbran todo tipo de situaciones hipotéticas de posibles fallos que pudieran ocurrir, creando caminos donde casi todo sale mal y toman como base situaciones del pasado que no les funcionaron y se enfocan solo en ver escenarios catastróficos que cada vez que los van pensando y repasando van incrementando los detalles y entonces incrementan la probabilidad subjetiva, en su mente, que nada tiene que ver con la realidad.

Probablemente ahora, te estés preguntando, cómo podemos disminuir el miedo que sentimos y evitar que nos frene y asesine nuestros sueños y anhelos de viajar, de emprender, de cambiar de trabajo, de lograr nuestra cuota de ventas.

El primer paso es tomar consciencia de que ese miedo es, autocreado, no es real, solo viven en nuestra cabeza, es una elección que estamos haciendo en nuestra mente inconsciente y que podemos tomar acciones para contrarrestar los posibles escenarios terribles que imaginamos.

No tener claridad en lo que se desea alcanzar, genera miedo, así que regálale a tu mente la certeza de lo que deseas lograr, ponle un número, una fecha, una lista de acciones, anticípate a posibles imprevistos y genera la manera de contrarrestarlos.

Si el reto que observas es ambicioso, no lo abandones, solo divídelo en partes. Para escalar el Everest, los alpinistas empiezan entrenándose en montañas más pequeñas y escalando en fases.

Aprende y desarrolla nuevas habilidades que te sean de utilidad para el reto que enfrentas y ponlas en práctica. La teoría es buena, pero no es suficiente. Recuerda que nadie aprende a escalar montañas, desde la comodidad del sofá de su casa.

Consigue un mentor y un coach que te ayude a entender cuál es la estructura mental que empleas para enfrentar los retos, porque ya lo has hecho antes, tambien hacerte consciente de que habilidades tienes que te ayudaran a lograrlo y a diseñar un plan de acción.

Solo no te esperes a tener todas las habilidades y aristas cubiertas, recuerda la frase de Joan Manuel Serrat. Caminante no hay camino, se hace camino al andar.

Visualízate logrando el reto, cuando nos visualizamos ejecutando una tarea, se activan las mismas áreas del cerebro que si en verdad lo estuvieras llevando a cabo y puedes prever cosas que habías pasado por alto, incluso darte cuenta de que ya tienes la capacidad para poder llevarlo a cabo las tareas y conseguir el resultado.

Si te preparas y utilizas el miedo como aliado, podrás alcanzar tus objetivos sin dejar que este te frene.

Soy Miguel Chanona y transformo los resultados de las empresas, cambiando la vida de las personas.